Peñarol Rugby 30 de Marzo, 2020

“EL AÑO QUE VIENE HAY REVANCHA”

El “carbonero” Evaristo González sabe que su equipo, Peñarol, dio pasos muy importantes en la primer Superliga Americana de Rugby que le servirán para el 2021.

Mezclar el rugby con el fútbol fue una de las apuestas asumidas por la Superliga Americana de Rugby que funcionaron, aún en la corta primera temporada. En el caso de Peñarol, tuvo a un rugbista de alma encabezando el proyecto, generando un envión positivo que permite soñar con el 2021.

“El año que viene hay revancha y vamos a estar preparados,” dice sin titubear Evaristo González, el Secretario General del Club Atlético Peñarol, rugbista activo que “cumplió un sueño.”

González, 54 años, empresario que sufre el impacto de la pandemia del Coronavirus por ser empleador de mucha gente, es además Secretario General del Club Atlético Peñarol, club que 1891 se fundó sobre tres deportes: el críquet, el rugby y el fútbol.

“Lo fundaron ingleses que trajeron el ferrocarril; con el tiempo el fútbol se convirtió en el deporte del club,” dice desde Montevideo.

Su pasión por el rugby lo llevó a liderar el proyecto del rugby en Peñarol. Pilar en Trouville durante nueve años hasta que emigró al extranjero. Al regresar, se unió en la primera línea de Añejos XV, equipo de veteranos con el que sigue jugando y que lideró durante diez años. Con ellos, acompañó a Los Teros en los últimos dos mundiales.

Evaristo González durante la presentación de la SLAR en 2019

Quiebre

“A Inglaterra 2015 fuimos 36 y a Japón 19, algunos con nuestras esposas,” comenta uno de los afortunados testigos del emblemático triunfo de Los Teros ante Fiji en Kamaishi.

“Ese partido fue un quiebre total en la historia del rugby de Uruguay, incursionando en un nivel impensable y abriendo la puerta a que jugadores puedan jugar en este rugby profesional todo el año. De no ser así, sería imposible competir en este nivel.”

Contar en Peñarol con varios de quienes jugaron en RWC 2019 es un honor que González carga con orgullo.

“Jerarquiza que en Peñarol haya habido tantos jugadores que estuvieron en Japón,” dice.

Respecto de la génesis, explica que desde la actual directiva del club “fuimos forjadores de volver a ser un club “atlético”, dándole a los amantes del deporte disciplinas como el handball, fútbol femenino, sala, para ciegos, hockey, vóley, basketball; constantemente ingresan disciplinas.”

Así, se sumó el rugby a finales del año pasado. “La idea de generar un rugby más popular, que llegue a más gente en Uruguay y combinar esto con Peñarol, el club con mayor cantidad de hinchas y socios del país, me pareció brillante,” cuenta sobre el acercamiento que tuvo en su momento el Presidente de Sudamérica Rugby Sebastián Piñeyrúa junto a Agustín Pichot.

En la cancha

Peñarol llegó a jugar dos partidos en casa, en el Estadio Charrúa, ambos con buen marco de público.

“Estaba teniendo una movida interesantísima, con aceptación general. La gente que es hincha de Peñarol es hincha a lo que juegue y se empezó a ver un mix de gente de rugby y gente que venía del fútbol que fue a acompañarnos.”

Entonces, lo pierde su fanatismo por el rugby. “Sé que se va a acercar más gente en el futuro porque el rugby es un deporte espectacular y cuando se lo ve y se entiende, se disfruta.”

Al igual que todos los que de alguna manera participaron de la primer Superliga Americana de Rugby, González comparte un cúmulo de sensaciones.

“Es un mix entre la alegría de haber arrancado y concretar la idea que era una quijotada y la frustración completa de que se corte, sabiendo que se podía hacer más.”

La fuerza mayor de una pandemia global ha frenado todo el envión de la SLAR, pero queda lo positivo.

“Acá hay algo muy lindo para recoger, algo que se veía muy difícil de lograr y que en los papeles no era muy viable. Arrancó de muy buena manera, con jugadores muy concentrados, pasando momentos muy lindos.”

Añejos XV en Japón, con Evaristo en el centro, agarrando la bandera uruguaya.

“Nunca pensé que podría ver a Peñarol jugando rugby. Todos los jugadores demostraron su felicidad, con compromiso. La experiencia fue totalmente positiva.”

González finaliza convencido sobre el buen futuro de la Superliga Americana de Rugby y de la rama rugby de Peñarol.

“Esto vino para quedarse; va a marcar el comienzo de un rugby que va a traer mucha gente y va a generar una atracción general.”